Los sicólogos describen un conflicto como un proceso dinámico y complejo impulsado por las emociones. Puede surgir cuando una persona percibe que alguien se opone a sus deseos, necesidades o visión de las cosas.
Un conflicto es un desencuentro de intereses con algo de pasión, es una expresión natural del comportamiento humano, que estará especialmente presente en cualquier relación de pareja.
Dado que, en un conflicto se encuentran presente las emociones con un algún grado de descontrol, es conveniente estar alerta para mantener un equilibrio aún bajo circunstancias difíciles y así alcanzar una buena solución (ver mensaje de amabilidad en tema de comunicaciones).
Por ello, es necesario entender las emociones y entrenarse en cómo contenerlas y canalizarlas adecuadamente ante un eventual conflicto.
De esto y más conversaremos en las próximas comunicaciones.
Para empezar, reflexiona partiendo desde las siguientes afirmaciones.