Sin importar el tipo de conflicto recurrente, hay muchas parejas felizmente unidas, ellos hallaron la forma de tratar la situación, sin destruir su relación.
A continuación se proponen algunas ideas.
1° Encapsular el conflicto a un tipo de situación, momento o lugar, supongamos el caso del conductor acelerado del mensaje anterior, circunscribir los conflictos a solo los viajes.
2° Desactivar o interrumpir el proceso que desata el conflicto, supongamos en el caso anterior.
a. Ella maneja y El hace de copiloto o;
b. Ella duerme mientras hace de copiloto o bien se sienta atrás.
3° Un acuerdo formal-escrito, relativo a conflictos aparentemente insalvable en asuntos importantes, como los generados por creencias, filosofías, finanzas, educación de los hijos,… descritos en el mensaje anterior (ver botón “Conflictos insolubles y amargos“).
- Para la seriedad y solemnidad del acuerdo, consideren que al final lo van a firmar y eventualmente comunicarlo a personas de su confianza.
- En el caso de los conflictos financieros, el acuerdo debiera incluir la formación de hábitos para desarrollar y cumplir presupuestos.
- No es lo deseable, pero puede ocurrir que el proceso de acuerdo sea extenso y que se necesite mucha paciencia; no hay que esperar soluciones rápidas. En estas circunstancias traten de no incluir nunca a un tercero.
- No obstante el punto anterior, puede que puntualmente se necesite pedir ayuda a un terapeutas, que sea de su confianza y que este tan interesado en su unidad como ustedes mismo.
- Consideren que todos los tratados deben estar abiertos a posibles cambios.
- Celebren el acuerdo una vez terminado.
Lo central para encontrar una solución en estos conflictos, sigue siendo la voluntad de arreglar las cosas que provee el amor de pareja. Porque con esto siempre hallarán una solución.
Para reflexionar responde la siguiente afirmación.